El gigante tecnológico Microsoft ha detenido la actualización Windows 10 October 2018 Update al verificar que borraba archivos de los usuarios. Así, la compañía ha decidido retirar la actualización y pausar el lanzamiento progresivo hasta nuevo aviso.
Tras anunciar su lanzamiento el pasado 2 de octubre, la página oficial de la firma ha explicado que la solución para aquellos usuarios que hayan perdido archivos con la actualización es reducir el uso del dispositivo afectado y consultar al soporte local de Microsoft.
En realidad, la actualización Windows 10 October 2018 Update se encontraba disponible en la página de Microsoft para los usuarios que quisieran descargar la instalación de forma manual. Sin embargo, la compañía ha anunciado que sería mejor no instalarla para evitar problemas.
No se trata del primer fallo de Microsoft. La compañía ya tuvo problemas con la actualización de la versión de abril, la cual trajo consigo una gran cantidad de quejas. De momento, no hay información sobre cuándo se lanzará nuevamente la actualización, por lo que los usuarios deberán esperar hasta que se solucionen los parches del sistema.
