El posicionamiento de la marca es el objetivo en común, por lo que el 55% de los expertos en marketing y el 74% de los influencers que participaron del estudio coinciden en que las acciones que realizan en conjunto se enfocan en posicionar productos o servicios.
En tanto que el contenido viral sigue siendo el objetivo del 49% de las marcas y del 72% de los influencers, y si a esto se le suma un seguimiento anual, planificando objetivos a largo plazo, se puede potenciar aún más la calidad del trabajo conjunto.
Al mismo tiempo, el estudio recomienda corroborar siempre que los objetivos comerciales de la marca estén acorde a las acciones que se están llevando a cabo con los influencers para así continuar creciendo más allá de contenidos efímeros.
Asegura de que existe mucha diferencia entre una pieza de comunicación tradicional y un contenido emitido por una persona que cree en la marca, expresándose con su estilo, con seguidores que confían en sus consejos y son testigos de la experiencia.
Y eso, rápidamente se traslada de “boca en boca” a la lógica de las redes sociales, en donde los usuarios buscan perfiles con los que se identifiquen, confiando en las experiencias de otros y tomándolas en cuenta antes de realizar conversiones.