Los smartphones están modificando la forma de producir las series y vídeos. Según el estándar de los dispositivos móviles, están empezando a producir directamente en vertical.
Por ejemplo, los dramas chinos están comenzando a grabarse exclusivamente en vertical, pensados específicamente para los smartphones y sus pantallas. Las características de estos dramas, comedias y demás producciones no se limitan únicamente a adaptar su contenido al formato vertical, sino que ajustan muchos más detalles.
A pesar de que los diálogos intrincados, diálogos internos, giros abruptos de guión o historias especialmente complejas no entran en este formato, las compañías tienen en cuenta el ritmo de la obra, su composición y el modo de enseñar su contenido. Por lo tanto, se puede decir que el formato vertical implica diseñar el contenido partiendo de las características mencionadas.
Las nuevas obras, algunas realizadas por Tencent, suelen tener cortes de cámara rápidos, pantallas partidas para ver la cara o la situación de dos personas y transiciones divertidas. De modo que, el usuario pierde el contenido espacial, pero lo gana en información visual. De hecho, la escena es mucho más importante, lo que resulta en un contenido más dinámico y fluido.
Por su parte, los creadores de contenido y las empresas tendrán que adaptarse al formato vertical. Hasta el momento, los dramas chinos llevan la delantera en la industria audiovisual.