Los videojuegos están influyendo en la industria de los smartphones cada vez más, haciendo que las grandes compañías vean los dispositivos móviles como un elemento potencial para sus nuevos videojuegos. De hecho, los smartphones están alcanzando las exigencias gráficas de muchos videojuegos.
Por ejemplo, Supercell ha registrado más de 3.461.660 euros con su juego Clash of Clans, desde que lleva en la tienda de aplicaciones de Apple, según indica Forbes. Este ejemplo demuestra las cifras que mueve la industria del videojuego a través de un dispositivo tan cotidiano, como es el smartphone.
Por su parte, el perfil del jugador móvil se ha transformado, ya que cualquier dispositivo permite tener una experiencia de calidad, sin tener que acudir a otras plataformas. La facilidad de acceso a los videojuegos ha hecho que casi un tercio de la población sea un jugador en smartphone.
A la vista de la tendencia del mercado, la industria de los dispositivos inteligentes ha decidido lanzar teléfonos gamer. Entre los beneficios que aporta tener un dispositivo gamer, se destacan los periféricos, la refrigeración, la batería y los modos de software, los cuales mejoran la experiencia de juego.