La sostenibilidad se ha convertido en una de las características más importantes que los consumidores valoran de las marcas. A fin de estudiar el impacto de las campañas relacionadas con este tema en los canales de social media, la plataforma SocialBakers ha realizado su Primer Índice de Sostenibilidad en Redes Sociales.
En concreto, el índice se ha enfocado en los negocios mexicanos y se ha planificado sobre una perspectiva global, de forma que estudia todas las acciones referentes a la Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Concretamente, los temas de medioambiente, conciencia social, ética corporativa y donaciones.
Entre las conclusiones del informe destaca el hecho de que el aprecio hacia las marcas puede llegar a crecer un 13% si éstas difunden sus acciones de sostenibilidad o RSC en las redes sociales. Básicamente, la firma sube otro escalón en cuanto a reputación y consigue disminuir un 38% los sentimientos negativos hacia sus productos.
Aún así, el impacto del contenido sostenible no siempre es el mismo, sino que dependerá de la clase de industria a la que uno se dirija. En este sentido, SocialBakers ha concluido que el engagement más alto se encuentra en el sector de manufactura, dentro de las compañías que la firma ha estudiado, al presentar sus esfuerzos por utilizar insumos y energías renovables.
Asimismo, la industria de consumo alcanza el mayor número de conversaciones positivas, en comparación con los servicios de telecomunicaciones, donde se registra la conversación más negativa del análisis.
En cuanto a la red social más adecuada para hablar de sostenibilidad, Facebook registra el 81,1% de la interacción de contenidos de este tipo. De hecho, la recepción es enormemente positiva entre sus usuarios, ya que una publicación consigue de promedio unas 572 interacciones, es decir, más de 2.200 publicaciones, creando 1.8x veces más interacciones que otras plataformas.
Por su parte, el uso de los plásticos es un tema que preocupa a los consumidores y que no ha dejado de tener importancia incluso en los meses de pandemia, cuando la mayoría de las conversaciones giraban en torno al Covid-19.
Justo cuando el movimiento ‘Fridays For Future’ estaba en su momento de gloria por la popularidad que consiguió, el asunto de los residuos de origen plástico se quedó apalancado en la mente del consumidor. De hecho, el tema de la sostenibilidad dejó de ser preocupante para los usuarios en abril, cuando surgió la crisis sanitaria, pero el tema volvió a resurgir entre los meses de mayo y agosto 2020.
