LinkedIn se suma a la tendencia de plataformas que monetizan el contenido de sus usuarios con una nueva iniciativa que permitirá a ciertos creadores de vídeo compartir ingresos generados por anuncios asociados a sus publicaciones. El movimiento refuerza la apuesta de la red social profesional por formatos audiovisuales y estrategias más cercanas al marketing de influencers.
La compañía, propiedad de Microsoft, introducirá este modelo con un grupo inicial de 30 creadores con alto seguimiento en la plataforma, especialmente aquellos que producen contenido en formato podcast o series dirigidas a audiencias empresariales. Aún no se ha especificado el porcentaje de reparto para los creadores independientes, pero se espera que siga la línea del programa Brandlink, en el que editores como Bloomberg o The Wall Street Journal reciben cerca del 50% de la facturación publicitaria derivada de sus contenidos.
La estrategia se enmarca en un contexto de crecimiento del vídeo dentro de LinkedIn. Desde que la plataforma implementó una experiencia de visualización a pantalla completa a principios de año, el consumo de este formato ha aumentado un 36%. Este nuevo entorno más dinámico busca captar el interés de anunciantes que ya están migrando parte de su inversión hacia contenidos de marca creados por voces influyentes en entornos profesionales.
Matthew Derella, vicepresidente de Soluciones de Marketing de LinkedIn, ha subrayado recientemente el auge del «creador B2B», un perfil cada vez más codiciado por los departamentos de marketing por su capacidad de generar confianza y cercanía en segmentos corporativos. Según datos de la agencia Influency del grupo Publicis, las campañas con creadores especializados en el entorno empresarial crecieron un 250% durante el último año, un indicio claro de la transformación del panorama publicitario en redes profesionales.
Este giro hacia la economía del creador también abre interrogantes sobre el papel de la inteligencia artificial en la generación de contenido. Estudios recientes apuntan a que más del 50% de los textos extensos publicados en LinkedIn ya están siendo generados o asistidos por IA, un factor que podría incidir en la autenticidad y eficacia de los contenidos patrocinados en el futuro inmediato.