«Three shades of green(washing)» es el nombre del informe con el que Harvard analiza uno de los fenómenos más discutidos de los últimos tiempos, el uso de ciertos valores, en este caso medioambientales, para lavar la imagen de una marca o empresa.
El greenwashing, como se lo conoce, es una de las preocupaciones de la sede holandesa de Greenpeace. Esta le encargó a la casa universitaria un estudio para conocer la situación actual del «lavado verde» y el provecho que hacen de la crisis climática.
Esta tendencia, que también ha sido abordada por expertos en la comunicación que están especializados en los mensajes de las compañías hacia los consumidores, fue detectada dentro de las estrategias y campañas de numerosas firmas en redes sociales.
Las marcas hablan de calentamiento global… ¿seguros?
De acuerdo a esta investigación, en la que se evaluó la actividad de estas marcas en redes como Twitter, Instagram, Facebook, TikTok y YouTube, indicó que la mayoría de los posts que se hacen no hablan del cambio climático de manera directa, sino indirectamente.
En general, lo que hace la mayoría es mostrar la «innovación verde» de sus negocios, pero no intentan concienciar realmente al público acerca de los peligros del cambio climático. Únicamente se limitan a «vender» sus productos o servicios a partir de este problema.
Los científicos se quejan de las marcas
«Las redes sociales son la nueva frontera del engaño y el retraso en la acción climática. Nuestros resultados muestran que, mientras Europa vivía el verano más caluroso jamás registrado, algunas de las empresas más responsables del calentamiento global guardaron silencio en las redes sobre la crisis climática«, dijo Geoffrey Supran.
El investigador del Departamento de Historia de la Ciencia de la Universidad de Harvard y autor principal del relevamiento, agregó que casi todas las marcas se dedicaron a «utilizar el lenguaje y las imágenes para posicionarse estratégicamente como marcas verdes, innovadoras y socialmente responsables«.