El BOE ha publicado, con fecha 21 de julio, la Orden Ministerial PCM/825/2023 que establece los criterios y el procedimiento de certificación de empresas emergentes. De modo que, la Empresa Nacional de Innovación (ENISA), dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, ha abierto el proceso para pedir dicha certificación. Hasta el momento, ENISA había recibido 1.900 muestras de interés para iniciar el proceso de certificación de startups.
Desde el Gobierno se prevé que, al menos, soliciten la acreditación 10.000 compañías que puedan acceder a los beneficios fiscales que se detallan en la Ley de Startups. El efecto de esta acreditación resultará en la creación de unos 150.000 nuevos puestos de trabajo, generando más facilidades tanto para quienes inviertan como para quienes funden esta clase de empresas innovadoras, teniendo un resultado multiplicador en la economía española.
El ministro de Industria, Comercio y Turismo, Héctor Gómez, comenta que: “la certificación de una startup en España, primer país europeo que contará con un sistema de emisión de certificados, estará basada en el cumplimiento de varios criterios, entre los que destaca la antigüedad de la empresa, que su facturación no supere los 10 millones de euros o que cuente con un 60 % de su plantilla en España, entre otros requisitos”.
“El establecimiento de este sistema otorga amplia seguridad jurídica al sector de las empresas emergentes en España, favoreciendo que cada vez más grandes fondos quieran invertir aquí. España no es sólo el mejor país para vivir, sino también para emprender y para invertir. Con esta orden culminamos el procedimiento del marco de la Ley de fomento del ecosistema de las empresas emergentes e iniciamos un nuevo tiempo de modernización y de grandes oportunidades no solo para el crecimiento económico, sino también para el mercado de trabajo”, añade Gómez.
Mientras que, José Bayón, CEO de ENISA, opina que: “Sin lugar a dudas, poner en marcha esta certificación es un hito para nuestro país, para el ecosistema emprendedor y para el Gobierno que, desde el principio, ha querido colocar en el centro el talento y la calidad empresarial pujante y variada con la que contamos. Para ENISA es muy importante haber sido parte decisiva en este proceso porque, además de dar valor al trabajo realizado durante todos estos años con un equipo al que le apasiona lo que hace, nos empuja a seguir creciendo, apostando por las miles de empresas que seguirán llamando a nuestras puertas para recibir el aliento y la confianza de las Administraciones públicas. En definitiva, nos consolida como instrumento público de referencia en el apoyo al emprendimiento innovador. Cuando decimos que “emprendemos el futuro que queremos”, decimos que queremos innovación y tecnología para un país que avance en todos los ámbitos y que ya es pionero con esta nueva norma”.
ENISA ha sido seleccionada como responsable de lanzar esta certificación en la Ley de Startups debido a su experiencia en la financiación de pymes y de empresas emergentes. Y es que, la compañía cuenta con una inversión de más de 1.260 millones de euros en préstamos participativos distribuidos en 8.280 préstamos, que han beneficiado a 7.220 empresas.
Las compañías beneficiadas han desarrollado su actividad principalmente en aplicaciones directas de la economía digital, como hardware, software, servicios e Internet. No obstante, también han habido empresas que han apostado por productos y servicios industriales. Entre los sectores que han recibido bonificaciones se encuentran la biotecnología, ingeniería genética, medicina, salud, servicios financieros, hostelería y ocio. Las compañías beneficiadas se han asegurado de que sus actividades estén relacionadas con la sostenibilidad, energía y recursos naturales, entre otras, lo que ha impulsado su reputación online en el sector de las startups.
