Las startups españolas están compuestas por hombres en el 80% de los casos

Las startups españolas están compuestas por hombres en el 80% de los casos

Investigadores de la Universidad de Málaga alertan de una clara concentración masculina en las startups españolas, alcanzando un 80% de presencia masculina en estas empresas emergentes. Este es el resultado de un estudio realizado por el grupo de investigación «Emprendimiento y Innovación» de dicha universidad, el cual analizó las principales líneas del emprendimiento innovador femenino y sus cifras en España.

Según los investigadores, esta situación es preocupante ya que evidencia una brecha de género en el ámbito del emprendimiento, en el cual las mujeres se ven en desventaja a la hora de crear y liderar startups. Estas cifras además contrastan con las estadísticas de la población española, donde el 51% son mujeres y el 49% son hombres.

El informe, que se realizó a partir de datos recopilados entre 2014 y 2019, destaca también que las startups lideradas por mujeres recibieron una financiación significativamente menor en comparación con las dirigidas por hombres. Mientras que las startups masculinas recibieron una media de 4 millones de euros en subvenciones, las femeninas solo obtuvieron una media de 2 millones de euros.

Esta disparidad en la financiación se debe en gran parte a la falta de confianza en las emprendedoras femeninas por parte de los inversores, quienes aún tienen prejuicios y estereotipos de género arraigados en su forma de ver el emprendimiento. Además, el estudio también reveló que las mujeres emprendedoras tienen más dificultades para acceder a redes de contactos y oportunidades de desarrollo profesional, lo que impacta directamente en su acceso a la financiación.

Ante esta situación, los investigadores de la Universidad de Málaga han propuesto una serie de medidas para promover el emprendimiento femenino y cerrar la brecha de género en el ámbito del emprendimiento. En primer lugar, sugieren la implementación de políticas públicas que fomenten la igualdad de oportunidades en el emprendimiento, así como programas de formación y mentoría dirigidos específicamente a mujeres emprendedoras.

Por su parte, la Universidad de Málaga ha desarrollado iniciativas para fomentar el emprendimiento femenino, como el programa «Women Up», que ofrece servicios de asesoramiento, formación y mentoría a mujeres emprendedoras. También han creado una red de contactos con empresarias y profesionales para facilitar la colaboración y el intercambio de conocimientos entre mujeres emprendedoras.

Además de estas iniciativas a nivel local, también se han propuesto acciones a nivel nacional, como la creación de un fondo de inversión específico para startups lideradas por mujeres, o la inclusión de cláusulas de igualdad de género en los criterios de selección de proyectos para acceder a fondos públicos.

Otra propuesta importante es la necesidad de promover la igualdad de género en el sistema educativo, fomentando las habilidades y competencias emprendedoras en las niñas desde una edad temprana. También es importante romper con los estereotipos de género en la educación, permitiendo a las mujeres acceder a carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, áreas en las que actualmente sigue habiendo una fuerte presencia masculina.

El informe de la Universidad de Málaga también destaca la importancia de visibilizar y reconocer a las mujeres emprendedoras para inspirar a nuevas generaciones de mujeres a emprender. Para ello, proponen la creación de una base de datos que recopile y difunda casos de éxito de mujeres emprendedoras en España.

En definitiva, es necesario tomar medidas concretas para promover la igualdad de género en el emprendimiento y cerrar la brecha existente en las startups españolas. Las mujeres tienen un gran potencial para liderar empresas innovadoras y exitosas, y es necesario eliminar las barreras que aún existen para que puedan desarrollar su talento y contribuir al crecimiento económico y social del país. La Universidad de Málaga ha dado un paso importante en esta dirección, pero es responsabilidad de todos trabajar juntos para promover un emprendimiento más equitativo y justo.

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