Una de las tendencias más notables en el mundo de la publicidad es la omnicanalidad. El consumidor no se limita a uno o varios medios, ni por lo físico o digital, sino que combina una gran variedad de procesos que lo conectan con diferentes medios y canales, pasando de soportes físicos a digitales constantemente.
En este sentido, las compañías que se publicitan deben escoger el soporte adecuado a su caso para poder optimizar los esfuerzos. El cliente se mueve tanto en las tiendas físicas como en los marketplace digitales, por ello los mensajes se deben presentar justo donde se encuentra el consumidor potencial. Debido a que los usuarios cambian constantemente de medios, el impacto publicitario puede convertirse en un auténtico reto para las marcas.
Un ejemplo de cómo gestionar la publicidad es la compañía Mediapost, quien adquirió el 100% de la firma tecnológica Ofertia en 2019. Gracias a que Ofertia es líder en marketing drive-to-store por medio de la difusión de folletos y piezas de publicidad de forma digital, ahora Mediapost cierra el círculo de la comunicación de ofertas y lanzamientos, estando presente tanto en el buzoneo inteligente como en el digital.
El objetivo de Ofertia es ayudar a los usuarios a preparar sus compras, digitalizando, categorizando y geolocalizando todos los folletos de ofertas para que puedan acceder a los mejores descuentos. De esta forma, el folleto de papel, un medio de publicidad tradicional y aceptado en la sociedad, se convierte en un material informativo, práctico y accesible a los consumidores, quienes pueden planear mejor sus compras y cuidar el ahorro familiar.
Y es que con Ofertia, los comercios tradicionales y las marcas disponen de un trampolín hacia la distribución de sus catálogos de una forma eficaz y medible, abordando a los usuarios cuando están en pleno proceso de compra.
No cabe duda que el folleto publicitario es una herramienta práctica y efectiva a la hora de ampliar la cartera de clientes. De hecho, el II Estudio de Publicidad Directa en España, realizado por Geobuzón y Kantar en 2020, indica que el folleto publicitario es una pieza de muy alto valor para el consumidor, quien lo conserva, consulta y utiliza para planificar la compra.
Al publicar el folleto en formato digital, las marcas disponen de un soporte extra para el cliente, el cual puede consultar la información mientras va de compras. Asimismo, la digitalización del folleto permite llevar a cabo una medición del retorno, la cual parte de la combinación del mundo digital con otras metodologías como el buzoneo inteligente. La mezcla de varios medios optimiza el folleto tanto para la marca como para el cliente final.
